EL VATICANO.- La Cumbre de El Vaticano contra la Pederastia, estuvo orientada a invitar a cambiar la mentalidad de los sacerdotes y no a castigar a los que han cometido abusos sexuales contra menores.
Entre las conclusiones de esta reunión hay algunas bastante contradictorias, como la de efectuar para los candidatos al sacerdocio “una evaluación psicológica por parte de expertos calificados y acreditados”; irónicas, como las de acompañar, proteger y cuidar de las víctimas, ofreciéndoles todo para el apoyo necesario en una completa curación, o absurdas como la de “elevar la edad mínima para el matrimonio hasta los 16 años”.
El Papa Francisco pidió hacer lo que no se ha hecho, pero no mostró ninguna intención llevar a la justicia a los sacerdotes pederastas que han sido encubiertos por la propia Iglesia y que aún están libres e impunes.
Estados Unidos, Irlanda, Chile, Alemania y España, son los paises donde se han llevado a cabo investigaciones que han obligado a la iglesia católica a realizar esta Cumbre.
Expertos han señalado que la proclividad a la comisión de los abusos sexuales no está en evaluar psicológicamente a los candidatos a sacerdotes, sino en el poder de todo el aparato eclesial para reprimir a los denunciantes o encubrir a sus miembros que han delinquido.
Con información de Desinformemonos.org