Para este arzobispo acusado de encubrir pederastas, el problema no son los abusos, sino ser homosexual.
SANTIAGO.- Un reportaje dio a conocer el interrogatorio en contra del ex arzobispo de Santiago de Chile, Francisco Javier Errázuriz, en la investigación por abusos sexuales y encubrimiento al interior de la Iglesia Católica.
La Tercera, uno de los principales periódicos chilenos, reveló que Errázuriz, el ex arzobispo se limitó a responder “no recuerdo” en 35 preguntas directas que se le realizaron. En 2 de ellas, y por consejo de su abogado, mantuvo silencio.
Destacó que entre lo poco que dijo, es que no se enteró de muchas acusaciones y cuando lo hizo, envió a los sacerdotes que habían cometido abusos a recibir terapia para «sanar» su homosexualidad.
En su testimonio, Errázuriz, y luego de que él mismo hiciera referencias a varias situaciones de relaciones homosexuales entre sacerdotes, y que, además, tenían denuncias por abuso, la fiscalía le pregunto su opinión de si ¿la homosexualidad es compatible con el sacerdocio?.
Errázuris respondió que “es mejor que no haya sacerdotes homosexuales. No está excluida una persona que domine totalmente su homosexualidad, pero la mayoría quiere tener la certeza de serlo y hacen actos de homosexualidad”.
El reportaje también señala que en el interrogatorio se le consultó sobre otra denuncia de pederastia investigada por las autoridades chilenas. El ex arzobispo confesó que mandó a un sacerdote a un centro terapeutico para curar su homosexualidad. “Otra medida que tomé fue enviar al sacerdote Domínguez al Centro Terapéutico Alberione, centro especializado en ayuda sicológica a sacerdotes en Guadalajara, allá estuvo desde mediados de mayo de 2009 hasta fines de julio de ese año”.
Este lugar trataba a “sacerdotes en casos de alcoholismo que eran homosexuales y conductas indebidas” agregó Errázuriz. al preguntarle quien costeaba este “tratamiento”, el ex arzobispo sostuvo que fue el Arzobispado, “eran medidas terapéuticas, de sanación”, agregó Errázuriz.
De acuerdo con información de EFE, Alberione, es una «casa terapéutica» fundada en 1989, en Jalisco, que ofrece el programa Génesis, que ofrece a los presbíteros y consagrados «apoyo integral en el área física, emocional y espiritual, para restablecer su vida y ministerio».