El propósito de crear el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia en 2004 fue visibilizar la situación de violencia y discriminación que padecen las personas de la diversidad sexual y de género, incluyendo a lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersex.
Lo que empezó como un proyecto del Comité IDAHO (International Day Against Homophobia) se ha convertido en una iniciativa colectiva que cuenta con la participación de redes regionales y temáticas que defienden los derechos de las personas con distintas orientaciones sexuales, identidades o expresiones de género y características sexuales. Esta iniciativa integra a organizaciones y acciones a nivel global, regional, nacional y local.
Actualmente, el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia se conmemora en más de 130 países, incluso en 37 donde las relaciones entre personas del mismo sexo son ilegales. Además se registran miles de actividades, tanto grandes como pequeñas, en todo el mundo.
El Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia ha obtenido el reconocimiento oficial de varios países, instituciones internacionales como el Parlamento Europeo y numerosas autoridades locales. La mayoría de las agencias de las Naciones Unidas también celebran el Día con eventos específicos.
Asimismo, en nuestro país, desde 2010, en el gobierno de Felipe Calderón, se decretó el Día de la Tolerancia y el Respeto a las Preferencias. Mientras que en 2014, durante la administración de Enrique Peña Nieto, se derogó lo anterior y se decretó el Día Nacional de Lucha contra la Homofobia. Por último, en 2019 se declara el Día Nacional de la Lucha contra la Homofobia, Lesbofobia, Transfobia y Bifobia, esto para nombrar y darle el peso necesario a las acciones reprobables contra la población LGBTI+.
No obstante, pese a que la actual administración de Andrés Manuel López Obrador, ha considerado al Movimiento LGBT «una cortina de humo del neoliberalismo para saquear al país». La información difundida en la página del gobierno enfatiza que «La promoción y protección de los derechos de las personas LGBTI+ es un tema fundamental en la agenda de México».
Así pues, en contraste con el discurso oficial del actual gobierno, lo que en la realidad impera es la desatención y el nulo interés de la actual administración por atender las vulnerabilidades de la población LGBT. Situación que se manifiesta en los servicios de salud públicos prestados a las personas que viven con VIH, quiénes en numerosas ocasiones han denunciado la falta de medicamentos, así como el rezago en la actualización de tratamientos de última generación.