DALLAS.- Natalie Woods, una chica residente de Addison, Texas, Estados Unidos, se encontraba cenando en el restaurante Snuffer’s cuando escuchó que en la mesa de al lado lanzaban varios insultos homofóbicos.
Un hombre le contaba a su familia sobre lo mucho que le enojaba su “asqueroso sobrino gay”.
Natalie sintió deseos de pararse y hacer una escena, pero optó por darle lección con mucha mayor educación y madurez y le pagó la cena a la familia.
En el ticket escribió un mensaje para toda la familia, mismo que les entregó la mesera cuando el hombre pidió la cuenta:
“Felices fiestas de parte de la mesa muy gay y muy liberal que estaba al lado suyo. Jesús me hizo así. Natalie. Postdata: Acepten a su propia familia”.
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