Así transformó un Porky una violación en un ‘roce incidental’

Así transformó un Porky una violación en un ‘roce incidental’

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CIUDAD DE MÉXICO.- Aunque Daphne Fernández, víctima de violación en Veracruz, denunció que Diego Cruz, uno de sus cuatro agresores, le “tocó los senos, le metían sus manos debajo de la falda y le introdujo sus dedos por debajo del calzón y se los introdujo en la vagina”, el juez Anuar González Hemadi no vio en ello una intención “lasciva” ni que tuviera la intención de “copular”, sino meramente fue un “roce o frotamiento incidental”, por lo que decidió otorgarle un amparo al joven de 21 años.

Según González Hemedi, nunca se tuvieron pruebas suficientes para demostrar la pederastia de Cruz contra la joven de 17 años y la Fiscalía de Veracruz no acreditó elementos del delito como el estado de indefensión de la víctima, el abuso sexual y la intención lasciva de satisfacer un apetito sexual.

En la sentencia en la que concedió el amparo a Cruz, el juez señala: “Un roce o frotamiento intencional no serían considerados como actos sexuales, de no presentarse el elemento intencional de satisfacer un deseo sexual a costa del pasivo”.

@DanushMB

Ahora, dos meses después de que España ordenara su extraditación, Diego Cruz es absuelto en el propio país donde cometió el delito junto con otros tres jóvenes, a los que apodaron Los Porkys de Veracruz.

En el documento ministerial del caso, que sucedió en enero del 2015, recoge la denuncia del padre de Daphne, Javier Fernández, en la que se relata cómo Enrique Capitaine, hijo del exalcalde de Nautla, Felipe Capitaine, y los vástagos de los empresarios Jorge Cotaita Cabrales, Gerardo Rodríguez Acosta y Diego Cruz Alonso, subieron por la fuerza a la hija de Fernández Torres al interior de un vehículo, en el que llevaron a la joven al fraccionamiento residencial Costa de Oro y abusaron sexualmente de ella en el baño del inmueble.

“La subieron contra su voluntad en la parte de en medio del asiento de atrás del auto y era custodiada por Jorge Cotaita por un lado (atrás del conductor) y Diego Cruz por el otro (atrás del copiloto). Estos dos sujetos le jalaban la ropa y la manoseaban por debajo de la falda, tocándole sus pechos y partes íntimas. Ella les insistió que no lo hicieran, que no quería eso, pero ellos, entre burlas y agresiones, seguían haciéndolo mientras Enrique Capitaine manejaba a toda velocidad, con Gerardo Rodríguez como copiloto. Todo ese tiempo, ella trataba de calmarlos y hacerlos entrar en razón, pero no lo logró”, se lee en el documento.

La decisión de conceder el amparo desató la indignación y el coraje entre la sociedad civil ante la complicidad que existe entre los agresores y el gobierno, que mantiene sin castigo a los responsables de un caso más de violencia machista en México. En las redes sociales, varios usuarios criticaron el amparo concedido a Cruz, y un grupo de mujeres llevaron a cabo una protesta frente a la Representación del Estado de Veracruz.


Con información de Desinformémonos

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