
MÉRIDA.- Un nuevo crimen de odio ha cimbrado a México, esta vez el perpetrado en contra del joven José Eduardo Ravelo Echeverría, también apodado cariñosamente como “El Güero”, el cual fue golpeado, torturado y abusado sexualmente por policías de la ciudad de Mérida, Yucatán.
Fue el pasado 21 de julio cuando José Eduardo fue detenido por los uniformados mientras caminaba por el parque de San Juan solo por que se “veía sospechoso”, relató la víctima antes de fallecer.
Eduardo de apenas 23 años de edad originario de Veracruz tenía 4 meses viviendo en Mérida y en ese momento se dirigía a una entrevista de trabajo entre las 10 y 11 de la mañana.
Versiones recogidas por Ruido señalan que el joven fue interceptado por 4 policías, los cuales lo golpearon brutalmente, lo esposaron y subieron a la parte posterior de la patrulla, donde además fue violado.
María Ravelo, madre del occiso se trasladó de Veracruz a Mérida, donde se encontró con su hijo vomitando sangre, por lo que trasladó al Hospital Agustín O’Harán.
En el hospital los médicos encargados de atenderlo se preocuparon más por la orientación sexual de “El Güero” que por las heridas que le hicieron los elementos de seguridad pública.
“No nos atendieron como esperaba dada la gravedad de lo sucedido. El doctor que lo recibió solo preguntó si era gay. Yo le respondí que él ya dijo que no es gay. Y aunque fuera, nadie tiene derecho a golpearlo y violarlo” explicó la madre.
María ogualmente llevó a su hijo malherido a la Fiscalía General del Estado de Yucatán, donde denunciaron las agresiones. Un medico legista corroboró que Eduardo sufrió abuso sexual, por lo que fue canalizado de nuevo al nosocomio.
“Lo examinaron y dijeron que sí tenían los resultados de la agresión y que sí había sido violado, que ya habían girado oficios para investigar qué unidades de la Policía operaron en la zona del parque de San Juan entre las 10 y 11 de la mañana. También me comentaron que revisarán las cámaras”.
El pasado viernes 6 de agosto María protestó con el féretro de su hijo en el Palacio de Gobierno para exigir a las autoridades justicia tras el crimen de odio.
La mujer ha pedido ayuda al gobernador Mauricio Vila Dosal que la apoye en la búsqueda de justicia.
Tras varias horas de espera, María fue recibida por Gabriel Puc Maldonado, director Jurídico de la Secretaría del Estado.
“Me aseguró (Gabriel) que los culpables van a pagar, que puedo irme con la seguridad de que se hará justicia y que los culpables están presos, privados de su libertad. No me dijo si eran elementos de la Policía Municipal de Mérida, ni sus nombres, ni cuántos eran, pero me aseguró que están privados de su libertad”.
“Me aseguró (Gabriel) que los culpables van a pagar, que puedo irme con la seguridad de que se hará justicia y que los culpables están presos, privados de su libertad. No me dijo si eran elementos de la Policía Municipal de Mérida, ni sus nombres, ni cuántos eran, pero me aseguró que están privados de su libertad”, agregó la mujer a un medio local.
Gabriel Puc mencionó a medios que no puede dar más información para no afectar el proceso, pero que el gobernador ha pedido justicia y llegará hasta las últimas consecuencias.
“El expediente de la carpeta de investigación ya se judicializó, el gobernador ya ordenó que se llegue hasta las últimas consecuencias. Va a ver justicia para la señora. Ya se dio apoyo económico y se vinculó con la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas”. explicó.
Ni Renán Barrera Concha, alcalde de Mérida, ni algún miembro de su equipo se han comunicado con la madre hasta el momento.