La principal amenaza para los fumadores no es el consumo del tabaco en sí, sino el que lo hagan a través de la combustión. Es decir, quemarlo como se hace con los cigarrillos tradicionales.
Diversos estudios científicos revelan que la mayor parte de las sustancias tóxicas que se desprenden al fumar se encuentran en el humo producido por la combustión, lo que contrasta con los dispositivos de calentamiento, los cuales reducen la exposición a emisiones nocivas.
André Calantzopoulos, Director Ejecutivo de Philip Morris International (PMI), señala que la combustión es el gran problema al fumar, pues los componentes dañinos que se desprenden son las que producen un efecto maligno en la salud. Es por ello que la empresa desarrolla diversas alternativas de consumo, que incluyen dispositivos que no queman el tabaco.
Sin duda la mejor alternativa es dejar de fumar. Pero si no quieres hacerlo hay opciones como IQOS, un dispositivo de calentamiento de tabaco, que en recientes días recibió la autorización de la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para comercializarse en dicho país como un producto de “exposición reducida”.
Esto quiere decir que, después de diversos análisis científicos, la FDA reconoció que se trata de una alternativa de menor riesgo para los más de 1,000 millones de fumadores adultos en el mundo. La meta de la empresa tabacalera es conseguir un futuro sin humo, y espera tener un gran avance al alcanzar a 40 millones de fumadores para que decidan cambiar a este tipo de alternativas en 2025.
Así que recuerda, lo mejor es nunca fumar o dejar de hacerlo, sin embargo, si no lo dejas, cámbiate a alternativas libres de humo.