Emiliano Zapata: ‘Era tan hombre que se acostaba con otros hombres’

Emiliano Zapata es uno de los personajes emblemáticos mexicanos y por a ser una de las figuras de bronce de la Historia nacional, no está exento de nuevas investigaciones a su persona, la cual con el paso de las décadas ha ido revelando matices alejados del macho mexicano, estereotipo con el que reiteradamente se le ha asociado.

La bisexualidad de Emiliano Zapata, explica mucho de su devenir en la Historia de México. 

Conocido como el Caudillo del Sur, de origen campesino, su actitud rebelde lo hizo candidato para ingresar a la leva, (se conocía como leva al reclutamiento obligatorio de la población para servir en el ejército) sin embargo Ignacio de la Torre y Mier, yerno de Porfirio Díaz, intervino por él, nombrándolo caballerango de sus establos en la ciudad de México.

En 1906, en el corral de la hacienda de San Carlos Borromeo, Ignacio de la Torre conoció a Emiliano Zapata. La personalidad de Emiliano, su porte y su gentileza ( al igual que el enorme bigote que le hacía tan varonil) cautivaron al terrateniente, quien no le quitó los ojos a Zapata el tiempo que estuvo en la hacienda.

Zapata, nacido en Anenecuilco, era un gran conocedor del mundo del caballo, por lo que, con el pretexto de ponerle a trabajar como caballerizo mayor o caballerango, se lo llevó a su mansión de la Plaza de la Reforma, en el centro de la capital.

La relación entre Ignacio y Emiliano trascendió al grado de que el Presidente Díaz advirtió de los dolores de cabeza que esto le daría al propio Sr. de la Torre y Mier.

Muy a pesar de Ignacio, Zapata regresó a Morelos donde se convirtió en un jefe revolucionario. Durante la ocupación de la Ciudad de México por las fuerzas zapatistas, Emiliano sacó de Lecumberri a su antiguo protector para retenerlo como prisionero itinerante, a donde fuera el caudillo.

Por otro lado, durante años Emiliano Zapata tuvo como secretario particular a Manuel Palafox otro personaje abiertamente homosexual y a quien estuvo a punto de fusilar debido a su orientación sexual.

Palafox,  quien era hombre de confianza de Zapata, fue conocido como «el Ave Negra» por su habilidad para las intrigas, anterior ministro de agricultura del gobierno convencionista, y de quien se tiene el indicio que  habría sido descubierto teniendo sexo con  un muchacho.

En 2012, en el marco de los festejos del bicentenario en un programa de canal 22, en entrevista con una soldadera esta refirió que el General Zapata «era tan hombre, pero tan hombre, que se acostaba con otros hombres».

La recreación del mito sobre la bisexualidad de Emiliano Zapata, rechazada en su biografía oficial, cobra vida en la novela «Zapata», de Pedro Ángel Palou (2006), de acuerdo con las homocrónicas Rafael Arribas donde, además de su relación con Ignacio de la Torre, se formulan otras insinuaciones basadas en «habladurías» que para Rafael Arribas,  son de dudoso fundamento.

La única referencia al asunto es el diario personal de Amada Díaz, su esposa e hija del Dictador, que anotó en una ocasión cómo su esposo y Zapata se revolcaban en el establo.

Por el lado contrario hay referencias de declaraciones de Zapata en contra de los afeminados, las muchas mujeres con las que estuvo y su obsesión por masculinizar su aspecto con su famoso bigote, señala Arribas en un artículo sobre el Caudillo del Sur. 

Durante años se ha especulado sobre la preferencia sexual de Zapata, sin embargo sus contemporáneos han dejado testimonios sobre un Zapata bisexual, razón por la cual CENSIDA tomó la imagen de los zapatistas para una campaña contra el machismo, de acuerdo al Historiador Alonso Hernández.

Emiliano Zapata nació el 8 de agosto de 1879 y fue asesinado el 10 de abril de 1919.

Con información de Alonso Hernández para el Obituario LGBTTTI Mexicano y  Rafael Arribas  para Homocrónicas. 

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