
En la escuela todos me dicen que soy “una puta”, pero la
neta es que no, ¿cómo le hago para detener los chismes de
una vez por todas? Marcky, 19 años, Torreón, Coahuila.
El problema es que la putería no necesita ser ejercida para que te
conviertas en un estandarte o ejemplo de ella. En la reivindicación
del término por un entendimiento neutral puedes ser feliz
como toda una puta. Deja atrás el estigma hacia tu culidistensa apariencia. Piénsalo bien.
Por otro lado, sino te agrada que te llamen de esa forma, deberías empezar por un autoanálisis que te permita reconocer qué rasgos te hacen ver como una sexoservidora a los ojos de la bola de pendejos cuyas opiniones consideras importantes.
Una vez que hayas concluido con ese momento de introspección
tendrás la oportunidad de discernir si el camino de la putería es capaz de resolver tu vida o al menos suplir algunas otras aspiraciones personales. El sexo y el dinero pueden comprar la voluntad de cualquiera, sobre todo si no se tiene una mejor habilidad que la de verse como una golfa de manera involuntaria, tal como te ocurre a ti.
Independientemente de si obtienes beneficios económicos o simplemente presumir tu físico es parte de tu personalidad,
En ciertos lugares del mundo y en las televisoras mexicanas hasta puede ser considerado una virtud.