Las comunidades trans están demostrando una increíble fuerza a nivel internacional, uniendo redes mundiales para despenalizar el trabajo sexual y mejorar la atención en salud con dignidad y responsabilidad.}
Este esfuerzo busca impulsar políticas públicas que fomenten el crecimiento sin juicio ni prejuicio, y luchar contra la violencia y la represión policial.
Además, se están estableciendo centros de atención y prevención, trabajando en colaboración con grupos de la sociedad civil para ofrecer pruebas rápidas, promover el uso efectivo del PrEP y garantizar el apoyo del sector salud en procesos hormonales y otros tratamientos esenciales.
Estas iniciativas buscan asegurar que las personas trans reciban el apoyo necesario sin poner en riesgo su salud, abordando de manera integral sus necesidades y derechos.